¿Cómo funciona una secadora de ropa?

Los electrodomésticos son artefactos sin los cuales actualmente muchas personas no pueden vivir. La importancia que estos han cobrado al facilitar o cumplir por completo tareas diarias es tal, que siempre se están desarrollando nuevos equipos.

Con sus orígenes en el siglo XIX, la secadora ha sido una máquina esencial desde hace más de un siglo. Más allá de secar grandes cantidades de ropa en cuestión de pocos minutos, la secadora también es muy útil en épocas de lluvia.

Mecanismo de acción de una secadora

El principio de esta máquina es secar la ropa con el uso de vapor caliente que sale por unas aberturas muy pequeñas en casi todo el interior, mientras la agita para poder alcanzar todas las partes de esta misma.

Partes de una secadora

Para conocer un poco más a fondo el funcionamiento de este artefacto debemos conocer sus partes fundamentales y la acción que estas cumplen.

Carcasa: Esta es la parte más exterior de toda secadora. Es la que recubre todas sus partes y las unifica.

Cable: Al ser una máquina eléctrica, necesita conectarse para adquirir la energía que requiere para funcionar.

Puerta: Generalmente estas incorporan un vidrio en el cual se puede observas hacia el interior y su función es que al ingresar la ropa, el aire caliente no escape.

Tambor: En esta parte es que se coloca la ropa y es en la que se secará posteriormente. El tambor gira moviéndola ropa, mientras el aire caliente es depositado en el interior.

Sistema de ventilación: A través de este se introduce el aire caliente. Generalmente se encuentra al fondo del tambor. En la parte trasera encontramos una abertura pequeña mediante la cual se absorberá el aire del exterior.

Perillas de control: Con estas se regula el tiempo que funcionará la secadora, así como la potencia o temperatura a la cual trabajará.

Escape: Esta parte es fundamental. Según el tipo de secadora que sea variará. A continuación entenderás la razón de esto.

Tipos de secadora

Existen 3 tipos de secadoras para ropa que al final cumplen el mismo propósito, casi de la misma manera. Las tres aplican el aire caliente como método de secado. Lo que hacen después con este es lo que las diferencia.

Secadora de evacuación: Este artefacto, extrae por la parte trasera aire y lo calienta con resistencia eléctrica, para luego utilizarlo. Posteriormente lo deshecha hacia el exterior.

Este tipo suele tener alguna clase de tubería que permite expulsar el aire fuera de la habitación. De no poseer esta pieza es recomendable usar la máquina en espacios abiertos o en espacios cerrados con ventanas y puertas abiertas.

Secadora de condensación: Después de utilizar el aire caliente, este tipo de secadora absorbe más aire del exterior y lo pone en contacto con el aire caliente. Al suceder esto, se condensa y de esta forma es desechado.

Secadora de bomba de calor: El mecanismo de acción de esta secadora es un poco más complejo, ya que reutiliza el aire caliente y así disminuye su consumo de energía.

Básicamente repite un ciclo en el que el aire caliente después de captar la humedad de la ropa pasa por un condensador que lo hace perder la humedad, para luego adquirir más calor y repetir la acción de nuevo.